Cumplir con su dieta médica

Planifique el éxito alimenticio y la mejor salud

Las dietas médicas guían las opciones de alimentos para ayudarle a controlar ciertas afecciones. Comer bien para su afección puede ayudarle a necesitar menos medicamentos y evitar complicaciones. La nutrición adecuada también puede ayudar a su cuerpo a sanar.

Tipos de dietas médicas

Existe una amplia variedad de dietas médicas. Algunas dietas médicas frecuentes incluyen:

  • Dieta para diabéticos. Controla los carbohidratos para lograr un nivel de azúcar en sangre estable.

  • Dieta cardíaca. Limita el sodio, las grasas y el colesterol para la salud cardíaca.

  • Dieta renal. Puede limitar la ingesta de líquidos, potasio y fósforo en pacientes con

    insuficiencia renal.

  • Dietas para evitar las alergias. Evita ciertos alimentos para las personas con alergias o

    sensibilidad.

  • Dietas para el control de

    síntomas. Evita los alimentos que desencadenan síntomas, como los alimentos fritos y grasos, en pacientes con enfermedad de la vesícula biliar.

Las dietas médicas pueden ser restrictivas y es esencial obtener la nutrición correcta dentro de esas restricciones. Cualquier dieta recetada debe seguirse bajo la supervisión de un médico.

Aprender a leer la etiqueta de un alimento

Lea las etiquetas de los alimentos para comprender lo que come. Preste atención a los ingredientes y a los datos nutricionales, y elija opciones sin aditivos. Obtenga más información sobre las etiquetas de los alimentos con estos recursos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (Food and Drug Administration, FDA).

Consejos para continuar con su dieta

Las dietas médicas pueden ayudarle a alcanzar sus objetivos de salud, pero seguir una dieta puede ser complicado. Es posible que tenga un desliz si no sabe qué comer, si no come para lidiar con los sentimientos o si participa en una actividad asociada a la comida. Siga estos consejos para estar listo y prepárese para el éxito.

Establecer rutinas. Cree rutinas y hábitos en lugar de confiar en la fuerza de voluntad. Planificar las comidas y tener a mano refrigerios saludables será de gran ayuda para seguir con su dieta. Mantenga a mano los alimentos que deberían formar una gran parte de su dieta y haga que las decisiones menos saludables sean más difíciles de conseguir.

Instruirse. Obtenga información sobre su dieta, lo que implica y por qué es importante para usted. Entender cómo la dieta puede proteger su salud puede motivarle a seguir por el buen camino. Obtenga información sobre los alimentos que debe evitar, cómo identificarlos y las posibles alternativas.

Las etiquetas de los alimentos son una excelente fuente de información. A menudo, los alimentos naturales sin etiqueta son excelentes opciones saludables, pero tenga en cuenta que pueden tener un alto contenido de sustancias que debe evitar para algunas dietas. Para alimentos sin etiquetas, puede encontrar información detallada en FoodData Central del Departamento de Agricultura de los EE. UU. (United States Department of Agriculture, USDA).

Empiece de a poco. Haga cambios pequeños y realistas, y desarróllelos. El cambio lleva tiempo, pero se hace más fácil. Si se equivoca, no sea demasiado duro consigo mismo y decídase a tomar decisiones diferentes la próxima vez.

Busque reemplazos. Muchas actividades se asocian con los alimentos y pueden provocar deslices alimenticios. Busque alternativas más sanas para sustituir los alimentos que debe evitar.

Cocinar en casa. Es mucho más fácil controlar lo que come si es el único que cocina. Aprenda cómo preparar algunos platos que sigan su dieta. Con el tiempo, puede agregar más recetas.

Haga un seguimiento. Lleve un diario de alimentos y haga un seguimiento de lo que come. Escribirlo todo puede ayudarle a seguir siendo responsable, a identificar los momentosen los que tiende a cometer errores y a proporcionar a su médico información útil.

Busque apoyo. Cuénteles a sus amigos y familiares sobre su dieta y por qué es importante para usted. Un amigo o familiar de confianza puede ayudarle a seguir siendo responsable. Los grupos de apoyo en línea y presenciales también pueden ser útiles.

Coma sus verduras primero

Si uno de sus objetivos alimenticios incluye ingerir más frutas y verduras, pruebe comer sus verduras antes que el resto de la comida. Se saciará y, naturalmente, comerá menos de otros alimentos.

Una mentalidad de más

En lugar de pensar en su dieta como restringida, concéntrese en lo que puede aportar. Por ejemplo, intente comer una amplia variedad de verduras frescas preparadas de forma deliciosa, en lugar de pensar en que debe evitar los alimentos fritos.

El expediente: 

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